Alguna vez les ha pasado que se ponen a divagar sobre lo que sería si tuviéramos súper-poderes.
El luchar por la justicia es un deber de todos nosotros, pero creo que lo más importante es reconocer el héroe que está dentro de nosotros. Cuantas decisiones no han sido las mejores para nuestra vida, cuantos errores hemos cometido, muchos sin duda. Pero aún así todos hemos aprendido de una u otra manera de lo que la vida nos ha dado.
Penas y alegrías, sufrimientos y desesperanza e infinidad de cosas que podemos esperar, sin embargo todos tenemos algo de héroe.
Un héroe es el que hace el bien a los demás sin fijarse ni decir nada, simplemente actúa para que los demás estén bien. Nunca vamos a poseer super-poderes como luego lo vemos en la televisión, se adquiere el poder muchas veces a través de la opresión a los demás.
Pero eso no es la bandera de un héroe, me preguntaba viendo en mi escritorio una imagen de Jesús y creo que en todos los tiempos ha sido el héroe por excelencia y su única bandera no fueron los super-poderes que sin duda pudo tenerlos por ser Dios, sino que simplemente fundamentó todo en una palabra que con su vida supo demostrar, esa palabra es AMOR… (Continua)
