miércoles, 28 de enero de 2009

Sigue adelante amigo....


Este pequeño espacio quiero dedicarlo a una persona muy especial, y simplemente quiero decirle que puede contar conmigo...

No te rindas, aún estás a tiempo de abrazar la vida y comenzar de nuevo, aceptar tu sombra, liberar el lastre y retomar el vuelo.

No te rindas, que la vida es eso, continuar el viaje, perseguir tus sueños, abrir las esclusas, destrabar el tiempo, correr los escombros y destapar el cielo.

No te rindas, por favor, no cedas, aunque el frío queme, aunque el miedo muerda, aunque el sol se ponga y se acalle el viento, aún hay fuego en tu alma, aún hay vida en tu seno.

Porque la vida es tuya y tuyo también el deseo, porque lo has querido y porque yo te quiero, porque existe el vino y el amor es cierto, porque no hay herida que no cure el tiempo.

Abrir las puertas, quitar los cerrojos, bajar el puente y cruzar el foso, abandonar las murallas que te protegieron, volver a la vida y aceptar el reto.

Recuperar la risa, ensayar un canto, bajar la guardia y extender las manos, desplegar las alas e intentar de nuevo, celebrar la vida, remontar los cielos.

No te rindas, por favor, AMIGO , no cedas, aunque el frío queme, aunque el miedo muerda, aunque el sol se ponga y se acalle el viento, aún hay fuego en tu alma, aún hay vida en tu seno.

Porque cada día es un comienzo nuevo, porque ésta es la hora y el mejor momento, porque tienes alas y puedes hacerlo, porque no estás solo y porque yo te quiero.

lunes, 26 de enero de 2009


En el camino aprendí, que llegar alto no es crecer,
que mirar no siempre es ver, ni que escuchar es oír.
ni lamentarse es sentir, ni acostumbrarse es querer...


En el camino aprendí, que andar solo no es soledad
que cobardía no es paz, ni ser feliz sonreír.
Y que peor que mentir, es silenciar la verdad.

En el camino aprendí, que puede un sueño de amor
abrirse como una flor, y como esa flor morir,
pero en su breve existir, ser todo aroma y color.

En el camino aprendí que la humildad no es sumisión
la humildad es ese Don que se suele confundir:

NO ES LO MISMO SER SERVIL,
QUE SER UN BUEN SERVIDOR.

Cuando vayan mal las cosas, como a veces suelen ir,
cuando ofrezca tu camino sólo cuestas que subir,
cuando tengas poco haber pero mucho que pagar,
y precises sonreír,... aún teniendo que llorar.

Cuando el dolor te agobie y no puedas ya sufrir...

Descansar acaso debes, pero nunca desistir.

CUANDO TODO ESTÉ PEOR...
MÁS DEBEMOS INSISTIR.

Anónimo

jueves, 22 de enero de 2009

he aprendido...


He aprendido... que cuando estás  enamorado, se nota... 

He aprendido... que una persona diciéndome, "Me alegraste el  día"... alegra mi día. 

He aprendido... que siempre puedo orar por alguien, cuando no  tengo otro modo de ayudarlo. 

He aprendido... que no importa que tan serio requiera la vida  que seas, todos necesitamos un amigo con el que podamos reir a carcajadas. 

He aprendido... que algunas veces, todo lo que una persona  necesita, es una mano que sostener y un corazón que entender. 

He aprendido... que la vida es como una espiral. Mientras más  se acerca al final, más rápido camina. 

He aprendido... que el dinero no compra la clase. 

He aprendido... que esas pequeñas cosas que pasan diariamente,  son las que hacen la vida espectacular. 

He aprendido... que debajo del duro escudo de las personas, hay  alguien que quiere ser apreciado y amado. 

He aprendido... que Dios no hizo todo en un solo día... que me  hace pensar que yo puedo? 

He aprendido... que ignorar lo hecho... no cambia los hechos. 

He aprendido... que es el amor, no el tiempo... el que cura  todas las heridas. 

He aprendido... que cada persona a la que conoces, merece ser  obsequiada con una sonrisa. 

He aprendido... que nadie es perfecto... hasta que te enamoras  de alguien. 

He aprendido... que las oportunidades nunca se pierden, alguien  más tomara aquella que tu dejaste pasar. 

He aprendido... que uno debe decir palabras suaves y tiernas,  porque más adelante puedes tener que tragártelas. 

He aprendido... que una sonrisa, es la manera más barata de  lucir mucho mejor... 

He aprendido... que no puedo elegir cómo me siento, pero puedo  elegir que hago con respecto a eso. 

He aprendido... que todos quieren estar en la cima de la  montaña, pero que toda la felicidad y experiencias agradables, suceden mientras  se escala hacia ella. 

He aprendido ... que estamos rodeados de muy buenas amistades,  que hay que cultivarlas y nunca dejarlas morir!!! 

LA FELICIDAD ES UN TRAYECTO, NO UN DESTINO

martes, 20 de enero de 2009

Amistad....


Hay una frase de San Agustín que en realidad siempre me ha llamado mucho la atención y dice:

 Ante todo debéis guardaros de las sospechas, porque éste es el veneno de la amistad. 

¿Por qué siempre es dificil comprender la amistad? En ocasiones nosotros mismos somos quienes nos complicamos la parte de las relaciones humanas. Lo que siempre me ha gustado de San Agustín es su búsqueda por la verdad y que al final de su vida supo encontrarla.

Ante su frase vale pensar que es bien clara, cuántas ocasiones tenemos una amistad y rompemos con ella por simples prejuicios, la mayoría de las veces preferimos el que dirán o lo que pueden interpretar la demás gente.

En varias ocasiones se pierde esa amistad porque nos ponemos prejuicios que solo veneficien a uno, saliendo el otro con una tremenda etiqueta que dificilmente podrémos quitar.

Y me pregunto: ¿Será eso leal? el santo de Hipona tiene mucha razón, hay que guardarnos de toda sospecha porque es el veneno de una amistad. Porque mejor no contar y platicar teniéndo la plena confiaza de contárselo a un amigo.

Cuando valoramos eso en verdad todo resulta distinto, es más agradable hablar de frente con la persona involucrada, sabiendo que la amistad siempre tiene una recompensa por dolorosa que sea.

Valorar a los amigos es un tesoro y más cuando éstos llegan a significar mucho en tu vida, deja a un lado los prejuicios, pregunta, confía y sobre todo no dejes que ese veneno termine por acabar lo que construíste con grandes sacrificios.

martes, 13 de enero de 2009

Cumpleaños¡¡¡¡


Siempre que alguien llega al día en que Dios les dio su vocación a la vida hacen una fiesta, el pastel, la comida, las velas, los amigos, las mañanitas, etc.

        Este día comúnmente lo recordamos como el día de “tu cumpleaños” y eso es porque se cumple el tiempo de un año más de vida. Las actitudes de muchos de nosotros son muy diferentes, por ejemplo, hoy para mí es ese día especial, que me cuesta muchísimo ya que no tengo buenos recuerdos de mi cumpleaños.

          Es por eso que para mí la fiesta, el pastel, las mañanitas prefiero solo cantarlas para los demás, es raro pero sé que para las demás personas son días muy especiales y eso me da gusto.

          He tratado de cambiar este día de sentirme mejor pero de verdad no lo consigo me cuesta trabajo, pero de todos modos trato de vivirlo bien con una actitud de agradecimiento hacia todas las personas que se acuerdan mucho de mí en este día, pero sobre todo de agradecimiento a Dios por todos los beneficios que me ha concedido a lo largo de estos 26 años de vida.

          Es buen momento para preguntarme que he hecho en este tiempo y sobre todo ¿cómo le he respondido al Señor que me ha llamado a la vida?

          La respuesta mejor a esta pregunta creo que es la generosidad, la vida es un aprendizaje y cada instante que pasa es para preguntarnos ¿qué hago de mi vida? Si no la entregamos así como a nosotros se nos ha dado, entonces creo que queda incompleta nuestra respuesta que le tenemos que dar a nuestro Creador.

          De verdad en lugar de ser un día de felicidad que realmente lo es sin duda, es de reto, de compromiso hacia Aquel que me ha dado el don de la vida.

           Dentro de mi vida muchas de las veces he caído y no he hecho bien las cosas, me acuerdo mucho del relato de José Luis Martín Descalzo en donde habla sobre “LA APUESTA DE SER HOMBRE”. Cuando cometemos un error siempre nos escudamos en decir «Soy humano».

            Con éstas expresiones parecería que ser humano es lo bajo, lo caduco, lo que muchas de las veces nos hace ser como animales. Y eso no puede ser cierto porque hay un tremendo abismo entre el animal y el ser humano, el ser humano cuenta con una razón, voluntad, conciencia, etc. Eso es ser verdaderamente humano utilizar estas capacidades.

            Y dice el autor español:                                                                                            

            Humano es la inteligencia que hace del hombre un permanente buscador de la verdad, un ser ansioso de claridad, un alma hambrienta de profundidad.

             Humano es la voluntad, el coraje, el afán de luchar, el saber sobreponerse a la desgracia, la capacidad para esperar contra toda esperanza.

             Humano es la conciencia que nos impide engañarnos a nosotros mismos, la voz que desde dentro nos despierta para seguir escalando, la exigencia que nos impide dormirnos.

         Humano es el afán de ser mejores, el saber que aún estamos a medio camino, el señalarnos como meta la perfección aunque sepamos que nunca llegaremos a la meta total.

              Todo eso es lo humano. Y difícilmente llegaremos a ser verdaderos hombres si empezamos por autodisculpar nuestros errores bajo la culpa de que «son humanos».

              Hasta aquí lo que nos dice Martín Descalzo, me parecen palabras muy ciertas y otra pregunta: ¿Cómo vivo mi vida? De verdad la vivo conforme a mis capacidades o realmente nos comportamos como animales, es más fácil renunciar al compromiso y darle rienda suelta a la vida, al final es mejor escudarse en «soy humano»

              Particularmente pienso que la vida es única y que si se te ha dado es para algo, somos llamados para algo y eso es lo que debemos buscar, misión que lograremos viviendo como verdaderos hombres.

              Gracias Dios mío por la vida, gracias por las personas que están a mi alrededor y de las cuales aprendo cada momento.

                Gracias a todas esas personas de las cuales aprendo a diario…