miércoles, 28 de enero de 2009
Sigue adelante amigo....
lunes, 26 de enero de 2009
En el camino aprendí, que llegar alto no es crecer,
que mirar no siempre es ver, ni que escuchar es oír.
ni lamentarse es sentir, ni acostumbrarse es querer...
En el camino aprendí, que andar solo no es soledad
que cobardía no es paz, ni ser feliz sonreír.
Y que peor que mentir, es silenciar la verdad.
En el camino aprendí, que puede un sueño de amor
abrirse como una flor, y como esa flor morir,
pero en su breve existir, ser todo aroma y color.
En el camino aprendí que la humildad no es sumisión
la humildad es ese Don que se suele confundir:
NO ES LO MISMO SER SERVIL,
QUE SER UN BUEN SERVIDOR.
Cuando vayan mal las cosas, como a veces suelen ir,
cuando ofrezca tu camino sólo cuestas que subir,
cuando tengas poco haber pero mucho que pagar,
y precises sonreír,... aún teniendo que llorar.
Cuando el dolor te agobie y no puedas ya sufrir...
Descansar acaso debes, pero nunca desistir.
CUANDO TODO ESTÉ PEOR...
MÁS DEBEMOS INSISTIR.
Anónimo
jueves, 22 de enero de 2009
he aprendido...
martes, 20 de enero de 2009
Amistad....
martes, 13 de enero de 2009
Cumpleaños¡¡¡¡
Siempre que alguien llega al día en que Dios les dio su vocación a la vida hacen una fiesta, el pastel, la comida, las velas, los amigos, las mañanitas, etc.
Este día comúnmente lo recordamos como el día de “tu cumpleaños” y eso es porque se cumple el tiempo de un año más de vida. Las actitudes de muchos de nosotros son muy diferentes, por ejemplo, hoy para mí es ese día especial, que me cuesta muchísimo ya que no tengo buenos recuerdos de mi cumpleaños.
Es por eso que para mí la fiesta, el pastel, las mañanitas prefiero solo cantarlas para los demás, es raro pero sé que para las demás personas son días muy especiales y eso me da gusto.
He tratado de cambiar este día de sentirme mejor pero de verdad no lo consigo me cuesta trabajo, pero de todos modos trato de vivirlo bien con una actitud de agradecimiento hacia todas las personas que se acuerdan mucho de mí en este día, pero sobre todo de agradecimiento a Dios por todos los beneficios que me ha concedido a lo largo de estos 26 años de vida.
Es buen momento para preguntarme que he hecho en este tiempo y sobre todo ¿cómo le he respondido al Señor que me ha llamado a la vida?
La respuesta mejor a esta pregunta creo que es la generosidad, la vida es un aprendizaje y cada instante que pasa es para preguntarnos ¿qué hago de mi vida? Si no la entregamos así como a nosotros se nos ha dado, entonces creo que queda incompleta nuestra respuesta que le tenemos que dar a nuestro Creador.
De verdad en lugar de ser un día de felicidad que realmente lo es sin duda, es de reto, de compromiso hacia Aquel que me ha dado el don de la vida.
Dentro de mi vida muchas de las veces he caído y no he hecho bien las cosas, me acuerdo mucho del relato de José Luis Martín Descalzo en donde habla sobre “LA APUESTA DE SER HOMBRE”. Cuando cometemos un error siempre nos escudamos en decir «Soy humano».
Con éstas expresiones parecería que ser humano es lo bajo, lo caduco, lo que muchas de las veces nos hace ser como animales. Y eso no puede ser cierto porque hay un tremendo abismo entre el animal y el ser humano, el ser humano cuenta con una razón, voluntad, conciencia, etc. Eso es ser verdaderamente humano utilizar estas capacidades.
Y dice el autor español:
Humano es la inteligencia que hace del hombre un permanente buscador de la verdad, un ser ansioso de claridad, un alma hambrienta de profundidad.
Humano es la voluntad, el coraje, el afán de luchar, el saber sobreponerse a la desgracia, la capacidad para esperar contra toda esperanza.
Humano es la conciencia que nos impide engañarnos a nosotros mismos, la voz que desde dentro nos despierta para seguir escalando, la exigencia que nos impide dormirnos.
Humano es el afán de ser mejores, el saber que aún estamos a medio camino, el señalarnos como meta la perfección aunque sepamos que nunca llegaremos a la meta total.
Todo eso es lo humano. Y difícilmente llegaremos a ser verdaderos hombres si empezamos por autodisculpar nuestros errores bajo la culpa de que «son humanos».
Hasta aquí lo que nos dice Martín Descalzo, me parecen palabras muy ciertas y otra pregunta: ¿Cómo vivo mi vida? De verdad la vivo conforme a mis capacidades o realmente nos comportamos como animales, es más fácil renunciar al compromiso y darle rienda suelta a la vida, al final es mejor escudarse en «soy humano»
Particularmente pienso que la vida es única y que si se te ha dado es para algo, somos llamados para algo y eso es lo que debemos buscar, misión que lograremos viviendo como verdaderos hombres.
Gracias Dios mío por la vida, gracias por las personas que están a mi alrededor y de las cuales aprendo cada momento.
Gracias a todas esas personas de las cuales aprendo a diario…