Siempre me ha llamado la atención el color verde y no es que sea mi color favorito, pero lo que transmite el color verde es la vida.
Se que tiene muchos significados pero este me gusta mucho, la vida. Pero ¿cómo se transmite la vida? Pienso que a través del amor. Cuando una pareja decide casarse sabemos que el principal objetivo de un matrimonio es la procreación, es la finalidad del matrimonio.
Por ello el hombre también colabora con la creación de Dios, trasmitiendo lo que Dios nos ha dado, la vida es un don inestimable, un regalo que se nos ha dado por amor.
El verde es para nosotros esperanza, la esperanza de que al final de nuestra vida hemos alcanzado y cosechado eso que siempre quisimos. Que la vida nos tiene cosas buenas y que muchas veces nosotros mismos las hacemos más difíciles. Dice el dicho: “La vida es para vivirse”, no conviene entretenerte en pensar que será de nosotros el día siguiente, sino mejor, que hacer por mejorar y dar lo máximo de nosotros mismos.
Quisiera compartir algo que me llamó mucho la atención:
«Dicen que a cierta edad las personas nos hacemos invisibles, que nuestro protagonismo en la escena de la vida declina y que nos volvemos inexistentes para un mundo en el que sólo cabe el ímpetu de los años muy jóvenes, las figuras delgadas y espectaculares...
Yo no sé si me habré vuelto invisible para el mundo...
Es muy probable, pero nunca fui tan consciente de mi existencia como ahora, nunca me sentí tan protagonista de mi vida, y nunca disfruté tanto de cada momento de mi existencia.
Descubrí que no soy un príncipe de cuento de hadas. (¡¡Por suerte!! debe ser muy aburrido)
Descubrí al ser humano que sencillamente soy, con sus miserias y sus grandezas.
Descubrí que puedo permitirme el lujo de no ser perfecto, de estar lleno de defectos, de tener debilidades, de equivocarme, de hacer cosas indebidas, de no responder a las expectativas de los demás.
Y a pesar de ello.... ¡quererme mucho!
Cuando me miro al espejo ya no busco al que fui... Sonrío al que soy...
Celebro la posibilidad de elegir, a cada instante quien quiero SER, me alegro del camino andado, de la experiencia que me dieron estos años.
Asumo mis contradicciones. Valoro lo recorrido.
Tan mal no me fue... ¡Estoy acá!
¡Qué bien vivir sin la obsesión de la perfección!
Después de todo cuando decidí, que no quería la perfección, comencé a accionar y a alcanzar objetivos, como bajar esos casi 45 kilos que tanto pesaban en mi vida!
¡Qué bien no sentir ese desasosiego permanente que produce correr permanentemente buscando que todos te quieran!
¡¡¡Qué bueno está empezar a quererse y respetarse uno!!!
¡Qué maravilloso reconocer que la felicidad está tan cerca nuestro, tan relacionada con nuestras búsquedas y nuestros mágicos encuentros interiores!
¡Qué suerte haber comprendido que la magia y el poder no están en el afuera, sino en mí!»
Quiero felicitar a una Señora que siempre me ha apoyado y dado su calor de madre, espero que este día sea muy especial y sobre todo que disfrute de los buenos momentos. En la vida a tenido grandes cosas y un marido que se desvive por ella. Hoy en su cumpleaños espero que agradezca a la Vida el don de contar con unos hijos que tienen el coraje de salir adelante. Nunca se rinda y siempre piense que vienen cosas mejores…. Y ojalá esa mirada verde siempre recuerde que la vida hay que vivirla… ¡FELICIDADES!